Elementos de la expresión oral
Al hablar, hay que respirar con tranquilidad, proyectar la voz y dominar el énfasis de la entonación. No se debe, al contrario, gritar y caer en la repetición de muletillas, como "verdá" o "este".
Estructura del mensaje. El contenido o mensaje de la persona que interviene en la conversación o exposición de un tema debe expresarse con claridad y coherencia. Esto significa no improvisar el discurso para evitar criticas que afecten la autoestima.
Vocabulario. Al hablar, debe utilizarse un léxico que el receptor pueda entender. Por eso, en primer lugar, hay que tomar en cuenta el tipo de público al que va dirigido el mensaje.
La expresión oral presenta una serie de cualidades que se deben tener en cuenta para su buen uso:
Fluidez. En lingüística, fluidez es la capacidad de un hablante de expresarse correctamente con cierta facilidad y espontaneidad. Se ve representada por la capacidad para crear ideas; producir, expresar y relacionar palabras, y para conocer el significado de las palabras.
Volumen. Hace referencia a la intensidad del sonido que utilizamos cuando hablamos. En una interacción es necesario manejar el volumen de acuerdo a la situación.
Ritmo. Es la relación entre los acentos y las pautas que se manifiesta por intervalos de tiempos breves.
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